Viernes 3 de junio de 2022

Este segmento institucional, todas las semanas, repasa las presentaciones que ingresan: los reclamos y las consultas de las audiencias transparentan y motorizan el trabajo de todas las direcciones de la Defensoría. A continuación, el sexagésimo segundo informe.

Para comenzar, una de las presentaciones del público surge luego de observar cómo en un canal de noticias se abordó la temática de salud mental. En su reclamo, sugiere que los medios de comunicación deberían hacer convocatorias para debatir como panelistas sobre esta línea a “profesionales con matrícula, con trayectoria y con experiencia validada”.

También se presentó un reclamo de una persona que advirtió que dos canales quitaron los subtitulados ocultos. Y, como su madre es sorda, no puede acceder a los contenidos. En esa misma línea de accesibilidad, ingresó una presentación más en la que se advierte que una señal no cuenta con la transcripción en vivo.

La siguiente presentación es en primera persona y refiere a lo dicho por un periodista de un programa de TV: “El conductor se refirió a mí, tras haber participado en otro programa invitado para hablar sobre la situación en Cuba por ser becario doctoral del CONICET especializado en estudios latinoamericanos y militante del Partido Comunista, como “el boludo de la semana”. Y se explaya: “Me insultó y agravió al aire y públicamente, y luego la producción subió ese fragmento a su canal de YouTube, dejando en claro que avalan y promueven la violencia mediática que ejerce Jorge contra distintas personas en su programa de televisión, en este caso siendo yo la víctima”.

Por echar a un invitado en vivo del programa que conduce “sólo porque no pensaba como ella”, por las expresiones contra la población trans y por los insultos contra el presidente, una conductora de un programa de televisión estuvo, como en otras semanas, en el centro de atención de las audiencias que reclaman ante la Defensoría del Público.

Otro grupo de personas, como sucedió la semana pasada, hizo foco un programa de televisión en el que, según se detalla: “sólo fomenta el odio entre participantes”. Y, en especial, contra uno. Es por eso que en la mayoría de esos reclamos se deja en claro que, en el envío, “el bullying es constante y naturalizado”.

Además, el eje de otras presentaciones estuvo en lo que expresó un conductor en un programa de televisión, en donde tuvo un enfoque discriminatorio y violento contra las personas LGBTIQ+ y, específicamente, la población trans. Aclaran, los reclamos, que lo hizo mientras contaba un “chiste”.

Por los dichos de un conductor a una conductora, al aire, mientras se daba “el pase” de un programa a otro, también ingresó un alto número de reclamos. Uno de ellos, especificó: “Lo trataron como si fuera un simple cruce entre compañeros. Y entiendo que dar visibilidad a una escena violenta sin cuestionarla es re victimización y también violencia mediática”.

Para cerrar, por comentarios racistas y xenófobos al pueblo mapuche en un programa de radio, por hablar de que son “extranjeros, invasores y que no habitamos este lugar” fue que la Defensoría recepcionó este reclamo.