Los derechos y la Defensoría, activos en las vacaciones
Para conversar, jugar y reflexionar, durante las vacaciones de invierno la Defensoría del Público creó en plazas del conurbano bonaerense un espacio de intercambio y de producción para difundir los derechos de las audiencias de la radio y la televisión.
Como los derechos no se toman vacaciones, en este receso invernal la Defensoría del Público estuvo en plazas y actividades públicas del conurbano bonaerense para compartir con chicos y grandes información sobre sus derechos como audiencias de la radio y la televisión.
El inflable que aloja propuestas de capacitación, de producción y la invitación al intercambio estuvo en San Miguel, Lanús, Castelar y Morón. El estudio televisivo recibió a chicos y chicas para presentar sus noticias. Contaron historias de las que son protagonistas: la visita a Tecnópolis, los juegos con amigos en la plaza del barrio, la salida al cine con la familia, una tarde en el teatro de su localidad. Frente a cámara y desde el decorado de “Mi noticia” hubo risas, saludos y la experiencia de transformarse en productores y productoras para relatar las vacaciones de invierno.
En la plaza Trujuy de San Miguel; en el Centro Cultural Municipal Leonardo Favio en Lanús; en la Plaza Cumelén en Castelar y en la Plaza General San Martín en Morón, algunos chicos y chicas eligieron compartir la mirada sobre los medios audiovisuales desde su propia experiencia. “A mí me gusta ver los dibujitos en la televisión y las publicidades me aburren”, dijo una de las chicas. “No me gusta ver el noticiero porque son todos chusmas y además está lleno de violencia”, agregó otro de los participantes.
La propuesta de la Defensoría del Público es generar espacios de encuentro para que la ciudadanía conozca sus derechos comunicacionales. Quienes conversaron con integrantes del organismo, señalaron entre sus principales preocupaciones en relación a los medios audiovisuales la violencia que se ve en las programaciones televisivas, los roles atribuidos a las mujeres, el uso de lenguaje que consideraron vulgar e inadecuado para el horario apto para todo público. Una pareja lo sintetizó frente a cámara: “Nos gustaría poder decir que los medios no discriminan, que no muestran imágenes que provocan estereotipos y modelos de belleza, pero realmente esto no sucede y muchas veces hace que no queramos ver la televisión”.
Quienes pasaron por el espacio de la Defensoría del Público se llevaron también material para conocer la tarea del organismo y para comunicarse, para presentar consultas, reclamos y propuestas. “Estamos contentos con esta Ley -señaló otro de los visitantes-. Antes no te quedaba otra que cambiar de canal y ahora tenemos un organismo como la Defensoría que nos defiende”.