Organizada por la Defensoría y el Espacio Memoria y Derechos Humanos, se llevó a cabo en el día de la y el periodista la charla “La ESMA como núcleo del aparato de difusión y acción psicológica del terrorismo de Estado”.

Organizada por la Defensoría del Público y el Espacio Memoria y Derechos Humanos que funciona en la ex ESMA, se llevó a cabo en el día de la y el periodista la charla “La ESMA como núcleo del aparato de difusión y acción psicológica del terrorismo de Estado”.

Además de la Defensora Miriam Lewin, la jornada tuvo la participación del comunicador y familiar de víctimas de la última dictadura Daniel Cabezas. Su mamá, Thelma Jara de Cabezas, fue obligada a participar de una operación mediática para “lavar la imagen” de la dictadura argentina mientras estuvo secuestrada en la ESMA. Además, el periodista Carlos Rodríguez relató su experiencia como empleado de la agencia de noticias Saporiti, que durante el golpe estuvo manejada por la Secretaría de Inteligencia del Estado.

El contexto temporal y político del fenómeno de las fake news, recurso comunicacional que antecede al terrorismo de Estado, fue el eje de la charla. “En esa usina de noticias falsas que fue la ESMA se construían las fake news de la época”, expresó Lewin. Y profundizó: “Usaban nuestra materia gris para producir pescado podrido. Un aparato para mostrarle al mundo que aquí no había secuestros, no había torturas, no se robaban bebés”. Y cerró: “Las fake news no son una novedad, es lo que hace muchos años conocemos como pescado podrido”, apuntó, aunque marcó una diferencia con la actualidad, cuando “esa información podrida se viraliza a una velocidad vertiginosa”.

Daniel Cabezas, recordó: “La dictadura utilizó a la prensa como un arma de guerra bombardeando con noticias falsas para instalar el terror. Ahora hay que fortalecer a los miles de medios comunitarios que son los que nos brindan las noticias reales”. Carlos Rodríguez, puntualizó: “Las fake news vienen de siempre y siguen estando”.