Finalizó el primer curso de formación docente sobre derechos comunicacionales de chicas y de chicos
Veinticinco docentes de la Ciudad de Buenos Aires finalizaron el curso “Los medios audiovisuales en el aula desde una perspectiva de derechos”, coordinado por la Defensoría del Público y la Unión de Trabajadores de la Educación.
Como parte de las acciones del Año por la inclusión de niñas, niños y adolescentes en los medios audiovisuales, la Defensoría del Público dictó su primer curso destinado a directivos y docentes de escuelas de la Ciudad de Buenos Aires, en articulación con la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE). El objetivo fue trabajar acerca de los derechos comunicacionales de los chicos y chicas, analizar las representaciones sobre infancia y juventud que proponen los medios de comunicación audiovisual y presentar herramientas para que los educadores y educadoras incentiven en las aulas el ejercicio del derecho humano a la comunicación.
Del curso participaron maestras de nivel inicial, de escuela primaria y de secundaria, que se desempeñan en distintas instituciones de la Ciudad. Los ocho encuentros fueron dictados por Cecilia Uriarte y Virginia Vizcarra, integrantes de la Dirección de Promoción y Capacitación del organismo, en la Escuela N°16 D.E. 17, Padre Agustín P. Nores, ubicada en el barrio Villa Devoto de la Ciudad de Buenos Aires.
El recorrido se desarrolló en tres módulos: El derecho a la comunicación de niños, niñas y adolescentes; Trabajar comunicación desde la escuela primaria y secundaria; y la Producción en comunicación. La Ley 26.522 de Servicios de Comunicación Audiovisual y la legislación asociada que también contempla los derechos comunicacionales de los chicos y de las chicas, funcionaron como sustento de la propuesta del curso.
Las docentes participantes llegaron con la expectativa de que a lo largo de la formación se ejercitaran herramientas concretas para trabajar estas temáticas en la escuela, y con esa aspiración coincidió la evaluación que hicieron al final del curso. “Ahora busco la voz de los chicos y de las chicas, programas donde los chicos muestren sus realidades. Trato de incentivar que mis alumnos disfruten, piensen, sean protagonistas y de generar producciones con ellos y ellas”, explicó una docente. Otra de las participantes añadió: “A partir del curso se amplió mi mirada crítica, ya que pude tomar conocimiento de mis derechos como audiencia y de los derechos de los chicos y las chicas”.
Con la idea de que la escuela es un espacio clave para la formación de los y las jóvenes como audiencias críticas y como productores de mensajes, y partir de esta buena experiencia, la Defensoría repetirá el curso durante el segundo cuatrimestre del año.