La Defensoría del Público mantuvo un encuentro con científicas y científicos, con académicas y académicos. El intercambio fue parte de una serie de encuentros que la Defensoría lleva a cabo para profundizar y debatir sobre las coberturas de la temática.

Las dificultades y desafíos que representa la cobertura periodística de la información socioambiental fue debatida por la Defensoría del Público con científicas y científicos, con académicas y académicos, para alcanzar propuestas que tomen en cuenta los derechos y necesidades de las audiencias.

El intercambio fue parte de una serie de encuentros que la Defensoría realiza desde el año pasado para enfocar las coberturas de la temática, cada día más presente en la agenda de los medios.

Entre los temas analizados fue mencionada la necesidad de evitar los titulares catastróficos, de explicar causas y responsables de la contaminación, de contextualizar los nuevos datos que aporta la ciencia, de darle mayor voz a los afectados, de no caer en la difusión de soluciones utópicas y evitar un sistema punitivista, con multas e impuestos para quienes deterioran el ambiente, que poco resuelven la magnitud del daño hecho.

Quienes participaron destacaron que es necesario trabajar en la formación de periodistas y comunicadores y comunicadoras, que muchas veces tienen dificultades para indagar sobre estos temas.

Hubo coincidencias sobre la urgencia de revisar los patrones de producción y consumo, debatir la transición energética, atender la persecución de defensores de la naturaleza y tomar conciencia de que la salud está vinculada con el ambiente.

Formaron parte del diálogo con la Defensora del Público, Miriam Lewin, la socióloga Maristella Svampa, el biólogo y filósofo Guillermo Folguera, el bioquímico Damián Marino, la ecóloga Irene Wais, el economista Guillermo Peinado, la socióloga Gabriela Merlinksy, el agrónomo Fernando Frank y la abogada Pía Marchegani.

En tiempos de pandemia, crisis climática y socioecológica, la ciencia es muchas veces desoída. La Defensoría propone, en ese marco, que la información socioambiental que llega a las audiencias esté basada en datos científicos confiables y con el propósito de generar conciencia sobre la magnitud y complejidad del problema que se presenta a escala mundial.