Taller para mejorar las coberturas de catástrofes
La Defensoría del Público realizó una jornada de capacitación para aportar herramientas a la cobertura mediática de catástrofes y situaciones de crisis.
Trabajadores de canales y radios privadas, estatales y comunitarias, junto con estudiantes de comunicación y periodismo, participaron en la Defensoría del Público del Curso de Capacitación sobre Cobertura de Catástrofes, con el objetivo de ampliar conocimientos sobre el desempeño de los medios audiovisuales en situaciones críticas para la población.
La Defensora del Público, Licenciada Cynthia Ottaviano, encabezó el equipo del organismo del que también fueron parte Hugo Muleiro, desde el área de Capacitación y Promoción, y Gerardo Halpern y Romina Paolino, de la Dirección de Análisis, Investigación y Monitoreo. Estuvieron también el director nacional de Operaciones de Protección Civil, Carlos Zoloaga, y capacitadores de la Cruz Roja Argentina y del Consejo Nacional de Bomberos.
Acorde con las disposiciones de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, la Defensoría promovió este encuentro tras analizar el trabajo y los desafíos de los medios audiovisuales ante situaciones críticas. Tal como planteó Ottaviano, se trata de que en radio y televisión se priorice información que tenga “relevancia social”, que contribuya a que la población pueda afrontar mejor las emergencias.
Los monitoreos realizados por la Defensoría, las indicaciones realizadas por las audiencias y los encuentros de intercambio y debate convocados por el organismo en 2013 con representantes de todas las etapas de producción de información en radio y televisión, verificaron la preocupación por algunas prácticas que se dan en estos casos. La vulneración de la imagen de las víctimas y de la propiedad privada y la “espectacularización” de las coberturas son algunas de ellas. De estas consultas y aportes surgió la Guía para la cobertura periodística responsable de desastres y catástrofes, presentada por la Defensoría del Público en 2013.
Durante las exposiciones, realizadas en la sede de la Defensoría entre las 9 y las 16, se examinó también la necesidad de protección de los equipos periodísticos para evitar la exposición a riesgos, así como el tiempo que requieren los organismos estatales y los no gubernamentales que intervienen en catástrofes para tener un conocimiento acabado de la situación que afrontan, sus consecuencias inmediatas y las necesidades que crea en la población, antes de generar un flujo informativo que responda a la demanda intensa de los medios audiovisuales.
Zoloaga planteó que cuando un equipo de cobertura periodística intenta vulnerar los “anillos de seguridad” que se crean en torno de un “punto de impacto” de una emergencia, como un incendio, un derrumbe o emanación de substancias peligrosas, sus integrantes se exponen a riesgos que a menudo no pueden ni siquiera determinar. Con ello se crea además una demanda adicional para los equipos de bomberos, rescatistas, sanitarios y de seguridad que afrontan la crisis.
Se hizo hincapié en la necesidad de que los medios audiovisuales que se comprometen en campañas de solidaridad con la población afectada coordinen previamente con las autoridades a cargo porque una ayuda no debidamente organizada o que incluya artículos que no son requeridos puede crear problemas profundos en la gestión de la crisis.
Representantes de la Superintendencia de Bomberos de la Policía Federal y del Consejo Nacional de Bomberos Voluntarios se refirieron a sus protocolos para la difusión de información. Destacaron que se requieren verificaciones y precisiones antes de reportar a los medios, incluso en una serie de aspectos que pueden ser materia de controversia judicial.
A su vez, periodistas presentes destacaron que se requiere más organización y eficiencia en la circulación de información por parte de los organismos y autoridades responsables del vínculo con los medios, que en determinadas circunstancias se encuentran sin ningún reporte oficial.
Los representantes de la Cruz Roja explicaron también que esa y otras entidades necesitan un tiempo de verificación de la crisis en el terreno antes de poder responder a demandas periodísticas. El primer paso, explicaron, es dar aviso a las autoridades competentes para aplicar después procedimientos de primeros auxilios.
Representantes del Sindicato Argentino de Televisión y de la Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires destacaron que ningún trabajador de los medios audiovisuales puede ser sometido a situaciones de riesgo, como circular por zonas vedadas por las autoridades o acercarse a puntos de crisis sin la protección indispensable. En ese sentido, dijeron que es necesario que estos temas sean debatidos permanentemente por los trabajadores en sus asambleas y que sean expuestos a los cuerpos de delegados y a las conducciones de los sindicatos involucrados.