Chicos y chicas del barrio ATE de San Miguel de Tucumán participaron de La Defensoría va al barrio, un proceso que conjuga la formación de audiencias críticas y de productores audiovisuales.

El Centro Cultural Mate Cocido es un espacio de referencia para niños, niñas y adolescentes del Barrio ATE, ubicado en la periferia de San Miguel de Tucumán. Allí, chicos y chicas se reúnen para participar de la radio y de talleres de teatro y de música. En ese marco, la Defensoría del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual llevó adelante una propuesta de formación para que los chicos y chicas conozcan y ejerzan sus derechos comunicacionales, como audiencias críticas y como potenciales productores. Durante seis encuentros, diez jóvenes de entre 15 y 25 años se encontraron para formar parte de estos talleres con el objetivo de analizar los modos en que los medios audiovisuales representan a la juventud y a la vida en sus barrios, conocer sus derechos comunicacionales y para producir un material audiovisual que muestre su barrio desde su propia perspectiva.

Durante los encuentros, los chicos y chicas reflexionaron acerca de cómo los representan los medios audiovisuales. Dijeron que “siempre que aparece el barrio es cuando roban o hay bardo, eso es lo único que aparece”. Además, compartieron lo trabajado con otros chicos y chicas que participan del centro cultural y también a través del programa de radio “Sin batuta”, realizado por la organización Mate Cocido.

El evaluar el proceso, Sonia García, docente y facilitadora del taller, sintetizó que fue un recorrido y un resultado altamente positivo. Los jóvenes del Barrio ATE manifestaron la voluntad de continuar estos encuentro para seguir produciendo otros cortos, con temáticas similares.