El colectivo de FM La Voz de los Pueblos, la emisora comunitaria de Pituil, provincia de La Rioja, participó de una jornada de formación con la Defensoría del Público con la intención de incluir nuevas voces al aire de la radio y profundizar en la gestión de su proyecto comunicacional.

La gestión integral y las dimensiones de sostenibilidad de un medio comunitario fueron los ejes trabajados en un taller de la Defensoría del Público junto a FM La Voz de los Pueblos, la emisora que transmite en el 90.5 Mhz desde La Rioja. Además, en la capacitación se abordaron aspectos propios de los proyectos comunicacionales que se proponen ampliar la pluralidad de voces.

La capacitación ayudó también a ordenar criterios, establecer prioridades y a fortalecer y valorar el recorrido del proyecto. “Me gustaría que la radio abra la cabeza de la gente, abra el juego, plantee cosas, problemáticas que no se conocen, la expectativa es que la capacitación nos ayude a descifrar cómo armar un equipo de trabajo”, sintetizó Karina, fundadora de la emisora. Gloria es docente jubilada y actualmente lleva adelante uno de los programas de La Voz de los Pueblos. Ella expresó que: “este taller ha sido algo novedoso. Veníamos con un poquito de miedo. La capacitación me abre las puertas. Nos han enseñado a trabajar en equipo y comprender al otro”.

Ubicada al pie del cerro Famatina, la FM La Voz de los Pueblos nació en agosto de 2012 como forma de resistencia a la minería a cielo abierto y el extractivismo. En la actualidad, la radio construye en un terreno propio su nuevo estudio y se plantea el desafío de sumar más voces y participantes en la programación de la radio, invitar a la escuela, el club o el hospital a integrar el aire de la FM de Pituil.

Quienes fundaron y forman parte de la radio participan activamente de las distintas asambleas ambientales de la zona. Por ello, la necesidad de tener un medio propio surgió con fuerza y a partir de la intención de visibilizar el tema ambiental. Suena en FM La Voz de los Pueblos y resuena en la cordillera una consigna: “El agua vale más que el oro”.